GALLOCANTA: EL FESTIVAL DE LAS GRULLAS.

He vuelto a la laguna de Gallocanta.

Casi todo el rato me decía: ¡Grullas, grullas, grullas!

Había muchas, miles.

Las he visto al atardecer y al amanecer, madrugando mucho, que es lo más bonito.
El caso es que mirando con el catalejo al amanecer, casi aún de noche, observé algo raro: era un jabalí que por la orilla de la laguna se había metido entre las muchas grullas que estaban en el dormidero, y las iba espantando. Fue una imagen muy bonita y emocionante.

También fuimos a ver otras lagunas cercanas (Guialguerrero, La Zaida -seca este año- y las Balsas de Santed).

Hemos participado en el Festival de las Grullas.
Este ha sido un fin de semana que he compartido con amigos: Adur, Udane y Candela.  Jugamos, hizo frío y hasta nos nevó un rato.